Las obras civiles hidráulicas son construcciones de ingeniería civil, ingeniería agrícola o ingeniería hidráulica, las cuales constituyen sistemas que tienen la finalidad de controlar el flujo del agua para su posterior aprovechamiento. En nuestra compañía nos dedicamos al desarrollo de estas infraestructuras hidráulicas, gestión integral de regadíos, y modernización de sistemas ya existentes, además de realizar todas las operaciones de mantenimiento. Hoy te explicamos que tipos existen y cuáles son las funciones que realizan cada una de ellas.
Tipos de obras hidráulicas
Las infraestructuras podemos dividirlas en varios tipos como: canales, presas, estaciones de bombeo, esclusas, redes de abastecimiento, además de otros sistemas de riego, drenaje o recogida de aguas residuales.
Canales
Son un tipo de construcciones que tienen como finalidad transportar corrientes de agua. Su transporte se realiza al aire libre, a diferencia de las tuberías. Este tipo de canales varía en su tamaño, pudiendo llegar a constituir inclusive canales fluviales navegables.
Los canales pueden constar de varios elementos, como compuertas de entrada, controles de nivel o sistemas hidráulicos de derivación. La finalidad de todos estos elementos es regular el flujo y transporte de agua a través de estos cauces.
Estaciones de bombeo
Una estación de bombeo es una estructura encargada de bombear agua para su distribución. Su funcionamiento implica el trasvase de líquido desde unos niveles energéticos iniciales a otros niveles energéticos superiores, con el resultado de que el agua es expulsada por presión.
Este tipo de estructuras son ampliamente utilizadas en diferentes campos, como el suministro de sistemas de riego o drenaje, así como en redes de suministro de agua potable y redes de alcantarillado. Las plantas de tratamiento de agua potable y aguas residuales también utilizan estaciones de bombeo para mantener su correcto funcionamiento.
Redes de abastecimiento de agua potable
Las redes de abastecimiento son otro tipo de obra hidráulica que conecta las distintas estructuras del sistema con el fin de entregar agua óptima para el consumo. Consta de varios componentes responsables de la red de captación, almacenamiento, tratamiento y distribución que en conjunto proveen de agua blanca a las personas.
Esta agua parte de manantiales, pozos subterráneos o aguas superficiales, como ríos y arroyos limpios. Una vez captada, el agua suele almacenarse en depósitos adecuados al efecto, desde donde se transporta a una planta de tratamiento apta para potabilización.
Por último, el agua se almacenan nuevamente y se transportan a través de tuberías de concreto a diferentes beneficiarios del líquido vivo.
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