Las aguas residuales, muchas veces significan un gran problema para algunas poblaciones que ven contaminados sus ríos, este suceso se acentúa cuando los residuos provienen de industrias textiles o cárnicas.
Estas industrias como los mataderos, salas de despiece o fábricas de productos previamente elaborados utilizan mucha agua potable que se convierte en residuos al llevar a cabo sus actividades. El trato de estas aguas no es siempre el mismo, el tratamiento dependerá de la instalación de donde provengan. Cuando provienen de los mataderos, el agua adquiere gran carga orgánica y en las fábricas son mayores y constantes. Generalmente todas son concentraciones elevadas de materia orgánica, sólidos, grasas, nitrógeno y fósforo.
La mejor forma de tratar estas aguas con tal cantidad de residuos en la industria cárnica es, a través de procesos que eliminen las grasas y aceites, tarea algo difícil. Se logra con varios tratamientos y procesos. En primer lugar se realiza un pre-tratamiento, que elimine los residuos sólidos, esto se logra filtrando el agua a través de rejillas donde la materia más gruesa quede acumulada. También se aconseja separar las grasas y aceites antes del tratamiento biológico, ya que estos tienen una demanda de oxígeno elevada. Posteriormente se realiza el tratamiento biológico.
El tratamiento biológico en la depuración de aguas se divide en tres procesos:
- Lodos de baja carga en la que la parrilla de difusores del sistema de aireación no ocupe la totalidad del biorreactor y sea posible eliminar materia orgánica disuelta como conseguir la desnitrificación.
- SBR que consiste en eliminar la materia orgánica y los nutrientes. Para esto es indispensable contar con un depósito que acumule el agua que va llegando.
- Por último, el proceso anaeróbico en el que se elimina el nitrógeno sin consumo de oxígeno.
Las tres alternativas de tratamiento biológico son eficientes y eficaces, pero cabe destacar el tratamiento biológico anaeróbico ya que conlleva unos costes de operaciones inferiores gracias al menor consumo energético y al mismo tiempo genera biogás.
Cada vez más las industrias adquieren equipos más eficaces para la depuración de estas aguas y cambian su metodología de trabajo incorporando por ejemplo el agua a presión en sus procesos productivos para minimizar el consumo.
En AEGRA contamos con un área especializada en el diseño, construcción y mantenimiento de estaciones de depuración de aguas residuales industriales. Ayudamos a nuestros clientes a cumplir con las normativas vigentes, evitando posibles sanciones y haciendo que su actividad no sea contaminante para el medio ambiente.
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