La pérdida de agua en las redes de distribución es un costo que la sociedad actual no debería soportar.
Este hecho representa un descrédito social. El agua es un bien y una necesidad de supervivencia.
La desperdiciamos sacándola de los ecosistemas y esto supone un costo adicional para la economía de nuestro país.
Este último punto afecta la economía de todos los contribuyentes. No solo pagas por el agua que consumimos, sino también por el agua que se pierde en el camino.
Si bien el consumo doméstico de agua ha disminuido año tras año, las pérdidas no han disminuido debido al aumento de los impuestos y, lo que es más importante, a una mayor conciencia colectiva sobre el tema.
Volumen de perdidas de agua dentro de la Red
Según Iagua, en 2014 (último año del que se dispone de datos) se perdió en nuestra red de suministro de agua potable en el equivalente a todo el volumen de los embalses catalanes, o sea, el consumo doméstico de 13,8 millones de personas.
La inversión insuficiente en infraestructura de red es notable, con alrededor del 40% de infraestructuras con más de 30 años y alrededor de una cuarta parte con más de 40 años.
Dada la falta de financiación, la tecnología debe ayudar a resolver este problema. Obviamente, cuando se encuentra una tubería rota, solo puede repararse o reemplazarse, pero de momento se desconoce dónde ocurren exactamente estos drenajes permanentes.
¿Cómo reducir la pérdida de agua en la red de distribución o red de suministro de agua potable?
La perdida de agua dentro de la red de distribución puede reducirse principalmente de las siguientes formas:
1. Predicción de fallos
Hay muchas causas del envejecimiento de las tuberías, pero las principales son la corrosión, la sobrepresión o las malas conexiones. Así que si tienes un equipo que mide corrientes de fuga que afectan a tuberías, vibraciones o presión, se puede monitorear continuamente el verdadero estado de la red.
2. Detección de fugas
El primer paso para evitar pérdidas es saber dónde se están produciendo las fugas, por lo que se pueden instalar sensores para medir caudal o presión en las diferentes válvulas del sistema.
En caso de cualquier incidencia, se obtendrán lecturas diferentes en un punto y en otro. Esto significará una acción más rápida y, a la larga, una mejor planificación del mantenimiento tanto a nivel analítico como operativo.
3. Operaciones Remotas
De la misma manera que es posible saber dónde está ocurriendo el problema, se pueden desplegar herramientas inteligentes y remotas, que permitan manipular la red según sea necesario, ya sea en operaciones rutinarias planificadas o mediante la activación/programación del dispositivo mismo como administrador de eventos específicos.
Por ejemplo, cambiar la apertura de la electroválvula en función del flujo leído de la tubería.
La tecnología ahora es lo suficientemente avanzada como para implementar dispositivos alimentados por batería administrados de forma remota a través de la red. Es decir, equipos completamente funcionales, fáciles de manejar y de fáciles de mantener.
Ahora bien, es claro que para implementar un sistema de estas características, se debe elegir las herramientas adecuadas para ello.
El entorno a controlar es muy exigente y las instalaciones distribuidas (depuradoras) están muy descuidadas.
Sistemas y tecnología para evitar la perdida de agua dentro de las redes de distribución
Por ello, se debe considerar que el conjunto de soluciones software-más-hardware debe incluir al menos:
Equipos con hardware ruguerizado.
Los dispositivos con hardware resistente pueden funcionar en estos entornos y pueden funcionar durante años sin operación y sin necesidad de mantenimiento.
Comunicaciones redundantes y seguras.
Las redes redundantes de comunicación y distribución de agua son infraestructuras críticas.
Sistema de software que trabajen teniendo en cuenta la geoposición.
Un sistema de software que tenga en cuenta la ubicación geográfica de los activos desplegados y pueda cruzar datos de varias fuentes, por ejemplo, la presión de los equipos de campo frente a la presión de bombeo de las instalaciones intermedias.
Beneficios de rentabilidad con esta solución
El ROI ante este tipo de solución es obvio: optimiza los costos de mantenimiento para que puedan enfocarse en actualizar su infraestructura y reducir las pérdidas económicas.
En otras palabras, La implementación de los no solo hay retornos ambientales y sociales, sino también retornos económicos.